¿Cómo afecta la diabetes a los riñones?
Cuando el azúcar en la sangre está demasiado alto durante mucho tiempo, puede dañar los vasos sanguíneos pequeños de los riñones. Este daño hace que los riñones no puedan filtrar la sangre tan bien como deberían. Con el tiempo, esto puede llevar a una condición llamada nefropatía diabética.

¿Qué puede pasar si los riñones se dañan?

Proteínas en la orina: Los riñones dañados pueden permitir que las proteínas que normalmente deben quedarse en el cuerpo se filtren en la orina. Esto es una señal de que los riñones no están funcionando bien.

Insuficiencia renal: Si el daño continúa, los riñones pueden dejar de funcionar por completo, lo que se conoce como insuficiencia renal. Si esto ocurre, podrías necesitar diálisis (un tratamiento que hace el trabajo de los riñones) o un trasplante de riñón.

Presión arterial alta: Los riñones dañados también pueden causar presión arterial alta, lo que empeora aún más el daño renal y afecta otros órganos, como el corazón.

¿Cómo puedo proteger mis riñones?

Controla tu azúcar en la sangre: Mantener tu nivel de azúcar dentro de los rangos recomendados es la mejor manera de proteger tus riñones.
Lleva una dieta saludable: Comer alimentos que sean buenos para tu salud general también ayudará a tus riñones.
Toma tus medicamentos: Si tu médico te ha recetado medicamentos para la diabetes, la presión arterial o el colesterol, tómalo según las indicaciones.
Realiza chequeos regulares: Es importante que te hagas exámenes de sangre y orina para asegurarte de que tus riñones estén funcionando bien.

Cuidar tus riñones es una parte clave de manejar tu diabetes y mantenerte saludable a largo plazo. Agenda una cita si tienes alguna pregunta o preocupación. ¡Tu salud es lo más importante!